Materiales muertos
Con deadstock nos referimos a esas grandes cantidades de tejidos, hilados y prendas sin vender que son la señal más evidente de uno de los grandes problemas del actual modelo de negocio de la moda: la sobreproducción. Pueden ser restos de una producción anterior, pruebas de color o prototipos, colecciones de muestras, tejidos o hilos que no entran en la colección, pero también artículos defectuosos.
Para un diseñador independiente o una pequeña marca, tener la posibilidad de encontrar tejidos o hilados de calidad a precios reducidos y en cantidades mínimas es una gran oportunidad. Cuando se trabaja con un número reducido, uno de los mayores obstáculos para la creación de colecciones es precisamente la compra de tejidos: las empresas fabricantes exigen mínimos de producción que a menudo son demasiado elevados para una marca pequeña. El límite de estos materiales es que están disponibles en cantidades limitadas, por lo que la producción debe planificarse con prudencia. Esta es también una oportunidad para las grandes marcas y empresas, una forma de menor impacto de deshacerse de sus productos no vendidos o defectuosos.
Fuente: Lottozero
Hoy en día hay muchas marcas que trabajan con materiales muertos y de desecho, reduciendo significativamente su impacto.
MTOF es una marca que produce prendas de punto utilizando material que de otro modo se desecharía. Seleccionan hilos de la más alta calidad para crear mezclas exclusivas y siempre innovadoras, prendas reversibles enriquecidas con estampados y aplicaciones bordadas.
AVAVAV, por su parte, es una marca florentina que crea patchworks con tejidos originales de las principales marcas de lujo. Trabajar con material muerto requiere necesariamente adaptar un poco las colecciones a los materiales que uno encuentra. La ubicación geográfica en este caso ayuda: dado que muchas marcas de lujo pasan por Italia en sus cadenas de producción, es bastante común encontrar tejidos de lujo en el distrito de Prato.