INTRODUCCIÓN
La globalización ha llevado a la fragmentación de la cadena de suministro, desplazando gran parte de la fabricación que originalmente se realizaba localmente hacia países en desarrollo, en busca de mano de obra de bajo costo y proximidad a fuentes de materias primas. En este escenario es difícil realizar un seguimiento de todo el ciclo de producción. Esto contribuyó a la creación de un sistema opaco, donde la información sobre procesos y proveedores es difícil de obtener, ocultando a menudo pésimas condiciones laborales.
Es fundamental que las marcas de moda adopten estrategias estructuradas para implementar trazabilidad y transparencia en sus negocios, recopilar información confiable sobre sus cadenas de producción y compartirla con todos los actores del campo, con el fin de identificar dónde la moda tiene impactos ambientales y sociales negativos y por lo tanto poder abordar un cambio positivo.